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terça-feira, 9 de junho de 2020

LA MUERTE NO ES MÁS QUE UNA PALABRA SIN SENTIDO Jorge Hessen

Traducido por: Mercedes Cruz Reyes 
Madri/Espanha

Sobreviviendo a la retórica de aquellos que dicen en voz alta que Covid-19 es una trampa ideológica, reafirmamos que nos enfrentamos a un nuevo coronavirus que conlleva más preguntas que certezas, especialmente para las personas con factores de riesgo. Soy el padre de una hija especial (no Down), que es una perla muy preciosa para nosotros. Sé que en todo el mundo hay familias de miles de niños especiales (personas con síndrome de Down) que viven días de angustia debido a los enigmas sobre los efectos de Covid-19 en niños especiales, además de los cambios drásticos en la rutina diaria de las terapias intensas y enseñanzas debido al aislamiento social.

Hay una proporción significativa de personas con síndrome de Down que ya nacen con deficiencias en el corazón, los pulmones y el sistema inmunitario, y que desarrollan diabetes y obesidad, y señalan que todas estas afecciones son factores de riesgo para Covid-19. [1] ¡Es verdad! Cualquier persona con enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, asma o personas mayores de 60 años son las más propensas a tener complicaciones fatales.

Un estudio publicado recientemente en el British Medical Journal (BMJ) aporta nuevos datos sobre dichos grupos de riesgo para el nuevo coronavirus. De hecho, los ancianos son más susceptibles a las complicaciones de Sars-Cov-2 debido a los cambios en el sistema inmunológico natural de la edad. En el caso de las enfermedades cardíacas, la circulación deteriorada y la debilidad de los pulmones parecen favorecer la agresividad de la infección. El asma, las enfermedades hematológicas, la enfermedad renal crónica, la inmunosupresión (causada por el tratamiento de afecciones autoinmunes, como el lupus o el cáncer) y la obesidad también están relacionadas con la muerte. [2] Sin embargo, lo curioso es que un estudio sin precedentes realizado por investigadores de la Universidad Federal de São Paulo (Unifesp) señala que más de 80 millones de adultos brasileños están en el grupo de riesgo de Covid-19. Aquí en Brasilia, "el número llega al 49,2% de la población, lo que equivale a 1.136.833 personas". [3]

La gran mayoría (84.5%) de los médicos brasileños cree que Brasil aún no ha experimentado la peor ola del nuevo coronavirus, como se muestra en la segunda encuesta de APM (Asociación Paulista de Medicina). Entre el 15 y el 25 de mayo [2020] se entrevistó a 2.808 profesionales de todo el país, de las redes públicas y privadas. Respondieron un cuestionario estructurado en línea sobre la plataforma Survey Monkey. La gran mayoría (75.3%) considera que el aislamiento social es importante, incluso con las pérdidas financieras que resultan de él, ya que el 85.2% informa una caída en los ingresos debido a la pandemia. Alrededor del 79.3% de los médicos de primera línea siguen aprensivos, pesimistas, deprimidos, insatisfechos y enojados. Entre los profesionales de primera línea, el 33,7% tenía pacientes que murieron por la enfermedad. [4

De los diferentes debates, todos son unánimes al afirmar que hay tres cosas para practicar en esta pandemia: aislamiento social, solidaridad y pruebas de diagnóstico. Sin solidaridad, no hay aislamiento. Sin pruebas, es inútil hacer aislamiento. Un día, las personas tendrán que abandonar la casa y, cuando se vayan, pueden contaminarse. ¿Podría la fe espiritista ser un antídoto contra Covid-19?

Creemos que el conocimiento espiritista proporciona una fuerza moral que puede preservarnos de muchas enfermedades, sobre todo porque, para el espiritista convencido, no debe temer a la muerte. En la devastadora pandemia de cólera del siglo XIX, Allan Kardec señala expresamente que debemos seguir las medidas sanitarias [5].

La calma debe ser ejercida, dominarse, para que podamos aprovechar el período de aislamiento social impuesto por las circunstancias de la pandemia, en la búsqueda de la meditación, ese infrecuente viaje interno y el conocimiento de uno mismo, ayudando a lograr la paz interior. La oración será un recurso primario para mantenernos conectados con Dios y las fuerzas superiores que sostienen la vida. Es urgente que le demos la debida importancia a la higiene para evitar la contaminación.

Es necesario evitar el miedo, que es peor que la enfermedad pandémica misma. Y no ignoremos los primeros síntomas de la enfermedad, que recomendarán medidas específicas. En 1868, Kardec publicó en el RE que "(...) es aterrador pensar en peligros de esta naturaleza [pandemia], pero, debido a que son necesarios (...), es preferible, en lugar de esperarlos  con temor, , prepararse enfrentarlos sin miedo, sean cuales sean sus resultados. Prepárense, por lo tanto, para todo, y sea cual sea el tiempo y la naturaleza del peligro, comprendan esta verdad: la muerte no es más que una palabra vana y no hay sufrimiento que las fuerzas humanas no puedan dominar". [6]

Referencias bibliográficas:

1              Disponible en https://www.bbc.com/portuguese/geral-52627581)  acesso 21/05/20
2              Disponible en https://saude.abril.com.br/medicina/coronavirus-novos-dados-sobre-grupos-de-risco/ acesso 23/05/20
3              Disponible en https://www.metropoles.com/saude/grupo-de-risco-da-covid-19-no-brasil-e-de-80-milhoes-afirma-pesquisa acceso 20/05/20
4              Disponible en Médicos consideran que lo peor de la pandemia aún está por venir, muestra la pesquisa en 06 de junio de 2020

5              KARDEC, Allan. Revista Espírita, novembro de 1865, RJ: Ed Feb 1990
6              KARDEC, Allan. Revista Espírita, novembro de 1868, RJ: Ed Feb 1990 - mensagem mediúnica recebida na Sociedade de Paris, em 16 de outubro de 1868, sobre a “Epidemia na Ilha Maurícia”

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