Traducido por: Mercedes Cruz Reyes
Madri/Espanha
merchitacruz@gmail.com
En el articulo “Aborto después el nacimiento: ¿Porque la criatura debería vivir?”, Publicado el 23 de febrero en el Jornal of Medicar Ethics, los autores Alberto Giubilini y Francesca Minerva, académicos en Melbourne, Australia, argumentan que “lo que llamamos de aborto después el nacimiento (el asesinato de un recién nacido) debería ser permitido en todos los casos en que el aborto tambien lo es, inclusive en aquellos en que la criatura no es deficiente. En vez del término infanticidio, universalmente aceptado para describir el procedimiento, ellos adoptaron la expresión “aborto después del nacimiento”. [1]
Una tendencia observada por activistas provenida junto a la de los estudiantes universitarios en los EUA, “es la creciente aceptación del “aborto después-nacimiento”, o sea, matar a la criatura después que el o ella nacieran, afirman lideres pro-vida “The Fix College”. El campus donde activistas locales y miembros del equipo de los “Creados Iguales” encontraron estudiantes con esta opinión incluyen a Purdue, de la Universidad de Minnesota y la Universidad Central de Florida.” [2]
Comentar cualquier cosa sobre el hediondo crimen de infanticidio o aborto siempre corren con historias monstruosas, abominables y deshonrosas. Gerald Warner, en el Scotland en el Sunday, asegura que "el lugar más peligroso del mundo para una criatura en Escocia es el útero de la madre. En 2010, la mortalidad infantil llevo 218 criaturas escocesas a la muerte. El aborto, 12.826".[3]
Recientemente, en Brasil, la gran prensa noticio que las autoridades policiales desmontaran un gran esquema de clínicas de aborto en Rio de Janeiro. Fueron presas decenas de personas que hubieron mandado a la prisión expedidos por la justicia, en la operación bautizada de “Herodes”. Las clínicas eran despreciables mercado del aborto. Sus propietarios son millonarios. En un promedio, tales mataderos facturaban cerca de R$ 300 mil al mes. No es para menos, pues se cobraba R$ 1.000,00 por curetaje, R$ 2.000,00 por succión y R$ 2.500,00pordestrozar al bebe a través del vacío.
Se espera que con la operación “Herodes” sea definitivamente desmantelado la cuadrilla de malhechores y “médicos” crueles. Tal cuadrilla realizaba diariamente decenas de asesinatos de bebes en Río de Janeiro. De entre los verdugos aprisionados están algunos “médicos” ancianos, reincidentes en el crimen e inexplicablemente con el registro profesional regularizado, a ejemplo del Dr. “A. G”, de 88 años (eso mismo, casi 100 años de edad), la médica Dra. “A.M.G.B”, de 65 años (ya había sido indicada en 2001 por 6352 abortos en São João de Meriti, en la Baixada Fluminense), el carnicero Dr. “B.G.S”, de 80 años conocido como “Doctor Aborto” ”, Dr. “C.E.S.P” conocido como ‘Paulista’, de 43 años, Dr. “G.L.S”, de 72 años y Dr. “E.S.F”, de 64 años.
Los heraldos de la legalización del aborto evocan las pésimas condiciones en que son realizados los procedimientos en las clínicas clandestinas. Sin embargo, en que pese al argumento, no nos engañemos, imaginando que el aborto oficial irán a resolver la cuestión del asesinato, de los niños en el útero; al contrario, lo aumentará bastante! Y lo peor, continuará siendo practicado en secreto y sin control, pues la clandestinidad es cómplice de y no exige explicaciones a la mujeres que escondieron a la sociedad el delito del aborto practicado.
Con excepción de la gestación que ponga en riesgo la vida de la gestante, cualquier otra justificativa es inadmisible para que una mujer se decida por el aborto. Si comprendiese las implicaciones siniestras que están reservadas para ella, ciertamente reflexionaría millones de veces antes de extinguir a un ser indefenso del propio vientre. Analicemos el inusitado y repugnante comportamiento de Rowena Shrimpton, británica de 49 años, que afianza ser apasionada por el marido, Roger, con quien está casada hace 28 años. Hasta ahí nada de censurable, todavía ella reveló para el jornal Daily Mail que quedo embarazada a los 21 y a los 30 años y en los dos embarazos deliberó hacer el aborto para no compartir al marido con nadie, ni aun mismo con un hijo. [4]
Bajo esa insana inquietud Shrimpton presuponía que la gestación podría deformar su cuerpo y dañificar su apariencia, lo que podría disminuir el “amor” (deseo) de Roger. Presentemente, con 49 años, Rowena revela que nunca piensa en los bebés eliminados en el propio vientre o hasta mismo como ellos serian actualmente si no hubiese abortado. Su único recelo hoy, pasmen! es que Roger, su idolatrado esposo, desencarne antes de ella, pues acredita que no conseguirá vivir sin su “querida mitad”. Sólo podemos concluir que Rowena Shrimpton es una psicópata y carece de tratamiento psiquiátrico.
Un aborto practicado bajo las justificativas de Rowena, aun mismo ante reglamentos humanos (el aborto es permitido en Inglaterra), es un crimen ante los estatutos de Dios. El gran maestro Chico Xavier resalta "los padres que cooperan en los delitos del aborto, tanto como los ginecologistas que lo favorecen, van a sufrir los resultados de la crueldad que platican". [5] Si los tribunales del mundo condenan, en su mayoría, la práctica del aborto, "las Leyes Divinas, por su turno, actúan inflexiblemente sobre los que alucinadamente lo provocan. Fijan esas leyes en el tribunal de las propias consciencias culpables, tenebrosos procesos de rescate que pueden conducir al cáncer y a la locura, ahora o más tarde. (...)".[6]
Los inveterados defensores del aborto defienden el derecho de la mujer sobre su propio cuerpo, como argumento para la descriminalización del aborto. Con todo, para los preceptos espíritas, el cuerpo del embrión no es o de la mujer, visto que ella abriga, durante el embarazo, otro cuerpo, que no es, de forma alguna, la extensión del suyo. El no nacido no es un objeto cualquiera semejante a la máquina de carne, que puede ser desligado de acuerdo con intereses circunstanciales, pero si es un ser humano con derecho a la protección, en el lugar más fantástico y sublime que Dios creó: el templo de la vida, o sea, el útero materno.
No nos engañemos, la medicina que ejecuta el aborto en los países que ya legalizaran el asesinato del bebe en el vientre materno es un medicina criminosa. No hay ley humana que atenué esa situación ante la Ley de Dios. parece que en Brasil la tasa de interrupción de embarazo supera la tasa de nacimientos. Esa situación ha estimulado grupos dispuestos a legalizar el aborto en Brasil, lo torna fácil, accesible, higiénico, jurídicamente “correcto”. Con todo, aunque eso pueda venir a ocurrir, JAMAS olvidemos que el aborto ilegal o legalizado Siempre será un CRIMEN ante las Leyes Divinas!
Es Obvio que no lanzamos los anatemas de la condenación desapiadada aquellas que están sumergidas en el corredor oscuro del aborto ya perpetrado, hasta para que no caigan en la valla profunda de la desesperanza. Expresemos ideas cuyo escupo es iluminarlas con el fanal del esclarecimiento para que observen más adelante, la opción del Trabajo y do Amor, sobre todo en las adopciones de hijos rechazados que actualmente se apiñan en los orfanatos. "Es preciso también saber que la ley de causa y efecto no es una estrada de única mano. Es una ley que admite reparaciones; que ofrece oportunidades ilimitadas para que todos puedan expiar sus engaños."[7] Errar es aprender, por lo tanto, en vez de de fijarse en el inocuo remordimiento, precisan aprovechar a la experiencia como una buena oportunidad para el discernimiento futuro.
Referências bibliográficas:
1 Disponível em http://www.zenit.org/pt/articles/o-aborto-e-o-infanticidio acesso 31/10/14
2 Disponível em http://www.thecollegefix.com/post/19896 acesso 31/10/14
3 Disponível em http://www.zenit.org/pt/articles/o-aborto-e-o-infanticidio acesso 31/10/14
4 Disponível em http://mulher.terra.com.br/vida-de-mae/mulher-fez-dois-abortos-para-nao-dividir-marido-com-filhos,554e5287ce867410VgnVCM4000009bcceb0aRCRD.html acesso 25/10/14
5 Xavier, Francisco Cândido. Leis de Amor, ditado pelo Espírito Emmanuel, SP: Ed FEESP, 1963.
6 Peralva, Martins.O Pensamento de Emmanuel.Cap. I Rio de Janeiro: Editora FEB, 1978
7 De Lima, Cleunice Orlandi. A Quem Já Abortou - artigo - disponível em http://www.espirito.org.br/portal/artigos/diversos/aborto/a-quem-ja-abortou.html acesso 20/10/14
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