LEGITIMA VISIÓN ESPIRITA DE JESÚS DE NAZARET (06.01.07)

Traducido por:

Merchita

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En medio de la creciente proliferación de ideas exóticas en el seno de nuestro movimiento, nos preocupan sobremanera aquellas cuyo resultado es la deturpación de la legítima visión espirita de Jesús de Nazaret. Existen algunos cofrades inquietos e invigilantes que desean proscribir a Jesús del Espiritismo. Son personas dotadas de minúscula insensatez que desbordan sus santas ignorancias y las torturantes cantinelas de que Jesús no es el único modelo de amor absoluto (¿). Alegan que seria injusto que 2/3 de la población de la Tierra que "nunca" oyeron hablar del Mesías, quedasen "huérfanos" de sus lecciones. Según la revista alemana Der Spiegel el panorama estadístico de religiosos actuales del Orbe es el siguiente: cristianos no católicos (17,0%) Cristianos católicos (16,9%) Musulmanes (23,1%), Hindis (13,0%), Budistas (6,1%), Judíos (0,2%) y Otros (23,7%).Se observa que el 1,3% de la humanidad procura seguir las enseñanzas de Jesús, y para la creencia de los otros 2,3 que no "conocen" a Cristo, a pesar del mundo globalizado actual, existirán y existen otros seres iluminados, sin embargo todos fueron, son y serán discípulos de Jesús. (1) En verdad Jesús, durante milenios, envió a sus emisarios para instruir a los pueblos, razas y civilizaciones con conocimientos y principios de la ley natural. Más allá de eso, hace dos mil años, vino personalmente a ratificar los conocimientos ya existentes, dejando la Buena Nueva como patrimonio para toda la Humanidad. Examinando el trayecto histórico de las civilizaciones identificamos que en todos los tiempos hubo misioneros, fundadores de Religión, filósofos, Espíritus Superiores que aquí encarnaron, trazando nuevos conocimientos sobre las Leyes Divinas o Naturales con la finalidad de hacer progresar a los habitantes de la Tierra. Entretanto, por más admirables que hayan sido sus misiones, ninguno se iguala al Adorable Nazareno. Aun mismo porque todos ellos estuvieron al servicio del Maestro Incomparable, el Guía y Gobernador Espiritual de este mundo de expiación y de pruebas. Kardec, en la introducción de El Evangelio Según el Espiritismo escoge de entre las cinco partes la Enseñaza Moral, lo único que no está afectado por controversias, pudiendo inclusive unir todas las creencias en torno de su mensaje universal. (2) En la Tierra, donde se multiplican las conquistas de la inteligencia (algunas resbalan y se entierran en las vallas profundas de las retóricas vacías) y se hacen más complejos los cuadros del sentimiento maltratando con el materialismo, sabemos que El "en el campo de la Humanidad [fue único] orientador completo, irreprensible e incuestionable, que renunció a la compañía de los Ángeles para vivir y convivir con los hombres". (3) En los tiempos áureos del Evangelio el apóstol Pedro, mediumnizado definió la trascendencia de Jesús, revelando que El era "el Cristo, el Hijo de Dios vivo" (4). En el siglo XIX el Espíritu de Verdad atestigua ser El "el Conductor y Modelo del Hombre" (5). Para el celebre pedagogo y genio de Lyón, el Cristo fue, "Espíritu superior del orden más elevado, Mesías, Espíritu Puro, Enviado de Dios y, finalmente, Médium de Dios." (6) No hay dudas de que Jesús fue el Adoctrinador Divino (7) y por excelencia el "Medico Divino", (7) según Andre Luiz. (8) Por su vez, Emmanuel lo denomina el "director angélico del orbe y Síntesis del amor divino". (9)Cuando Allan Kardec cuestiono a los Espíritus sobre quien había sido el ser más evolucionado de la Tierra, recibió una respuesta tan corta como profunda: "Jesús". Su lección es no solo piedra angular del Consolador Prometido, de la Doctrina de los Espíritus, más la regla de medida, o referencia universal con que mediremos nuestro proceder, nuestro avance o retroceso de espiritualización que nos propusimos: la visión real de lo que somos, en lo intimo de nuestra conciencia y lo cerca o distante que estamos del amado Maestro Jesús que nos exhorta a amarnos unos a los otros como El nos amó.(10) Amado por unos, odiado por otros, indiferentes para muchos, Jesús dejo enseñanzas muy simples más profundas, el aplicó la filosofía que difundía, desconcertando a los enemigos gratuitos, granjeando apoyos en el pueblo y confundiendo a los restantes. A los Espiritas sinceros cumple no perder de vista esa realidad de suma importancia - la total vinculación del Espiritismo con las enseñanzas de Jesús, el Cristianismo primitivo, por la base moral común a ambos, sin desvíos impuestos por el interés de los hombres.El vela por el gobierno terrestre y Se compadece de cada uno de nosotros, facultándonos el recomienzo y la paz. Cada palabra que el Maestro plasmó en la atmósfera terrena se dirige a todos nosotros, entonces, hoy y siempre independientemente de donde podamos estar u de lo que hagamos. El Meigo Galileo transciende a las dimensiones del análisis convencional y del grado de desenvolvimiento cienfico, moral o espiritual del mayor de nosotros intelectuales, por cuanto El ya era constructor de todo nuestro Sistema Solar, cuando la vida en este planeta no se había presentado.
Jorge HessenE-Mail: jorgehessen@gmail.comSite: http://jorgehessen.net FONTES:1- Emmanuel explica que los Capelinos, al sean recibidos por Jesus, habrían guardado las reminiscencias de su planeta de origen y de las promesas de Cristo, que las hubo fortalecido al largo del tiempo, "enviándoles periódicamente sus missionários y mensajeros." Los enviados del infinito hablaron en China milenar, en Egipto, en la Pérsia etc. 2- Kardec, Allan, El Evangelio Según el Espiritismo, RJ: Ed FEB, 2001, Introducción 3- Revista Reformador - jan/2005 4- Mt 13, 16-17. 5- Kardec, Allan. El Libro de los Espíritus, RJ: Ed. FEB, 2001, pregunta 625 6- Kardec, Allan. La Gênese, RJ: Ed. FEB, 1998, XV, item 2 7- Xavier, Francisco Cândido. Los Mensajeros, Dictado por el Espíritu André Luiz, RJ: Ed FEB, 2000, cap. 27) 8- Xavier, Francisco Cândido. Missionário de la Luz, Dictado por el Espíritu André Luiz, RJ: Ed FEB 2003, cap. 18 9- Xavier, Francisco Cândido. El Consolador, Dictado por el Espíritu Emmanuel, RJ: Ed FEB 2001, 283 y 327. 10- Revista Reformador - nov/1998