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terça-feira, 3 de fevereiro de 2015

DONDE ESTALLA LA VIOLENCIA EL ESPIRITISMO SE HACE PILAR DE LA EDUCACIÓN (Jorge Hessen)

Traducido por: Mercedes Cruz Reyes
Madri/Espanha

La violencia urbana ocurre en la mayoría de las ciudades modernas cara al “consumo” del subproducto de la agresión potencializada por la televisión, la radio, el periódico, las revistas, la prensa tecnológica. Hay diversos tipos de violencia que normalmente sugieren acciones organizadas de jóvenes que actúan en grupo contra el patrimonio material y las personas, comúnmente unidas a cuadrillas que demarcan territorios. El salvajismo del hombre civilizado tiene sus raíces profundas y vigorosas en la mata espesa de la violencia. El hombre brutal tiene sus leyes: subyugar, humillar, torturar y matar.

El utilitarismo de las sociedades contemporáneas robotizo al hombre, tornándolo un autómata inconsecuente. El mismo “cristiano” que se prostra ante las imágenes frías de los altares en las iglesias o en la idolatría de la Biblia “decorada” en los templos, vuelve a su puesto de mando para ordenar torturas canibalescas. El hombre contemporáneo vive atormentado por el miedo, ese enemigo atroz que lo asombra. Una vez sometido a las contingencias de la vida actual, de inseguridad y de incertezas, sufre como resultado en trastornos graves de la mente, por la angustia disolvente de la propia individualidad.

Se dice que Oriente Medio es un área violenta. Si, es verdad, sin embargo América Latina es una de las áreas más brutales y arriesgadas de la Tierra, conforme demuestra el portal Business Insider. De las 50 ciudades más violentas alrededor del mundo 16 están en Brasil. La “Patria del Evangelio” es gran productora de armas (contrastando con el compromiso espiritual) por eso creemos que prohibir su comercialización en el mercado interno es una práctica recomendable pues el problema sería atacado directamente en su origen. (1) En el “Corazón del Mundo” el homicidio es el crimen más común. Además de los asesinatos, el tráfico de drogas, guerras de pandillas, inestabilidad política, corrupción y la pobreza influencian en alta violencia en las ciudades listadas por el portal Business. (2)

Obviamente este análisis es restrictivo, y tiende a reforzar las diversas variaciones que pesan en los distintos factores que actúan con brutalidad, siendo que las formas de salvajería empleada y su intensidad varían mucho. Por tanto, el aumento de la violencia que se conoce desde la pos-guerra no es imputable a una categoría específica de individuos, mas si a una generalización de los comportamientos agresivos en las diferentes camadas de la población.

No se pode desconsiderar esos otros tipos de violencias (no menos impactantes) como las que ocurren diariamente en el tránsito, las violencias sexuales, los malos tratos infantiles o las agresiones conyugales. Muchos conflictos que antes se manifestaban en enfrentamientos sangrientos actualmente fueron transmutados en los diferentes tipos de agresivas competiciones deportivas.

Todos tememos a la violencia, obviamente. Muchos yerguen altos muros con cables electrificados alrededor de sus residencias, intentando mantener la paz doméstica. Contratan seguridad para proteger sus empresas y sus hogares. Instalan equipamientos sofisticados que los alertan de la llegada de eventuales usurpadores de sus bienes. Con todo, existe otro tipo de violencia al que no damos atención: es la que está fincada dentro de cada uno de nosotros. Violencia íntima, que algunos alimentan, diariamente, concediendo que ella se torne un animal voraz.

Paradoxalmente, predicamos la paz produciendo cabezas nucleares, cañones asesinos; codiciamos resolver los problemas sociales activando la edificación de los presidios y burdeles. "Ese progreso es el de la razón sin la fe, donde los hombres se pierden en la lucha sin gloria y sin fin”. (3) La actual situación de violencia, maldad, injustica, opresión de los poderosos sobre los débiles, tanto en el nivel de personas, como instituciones y países, ciertamente tendrá que ceder lugar a una nueva era de paz, harmonía, fraternidad y solidaridad.

Una de las soluciones para la criminalidad seria desarmar a la población brasileña a través de la prohibición del comercio de armas de fuego en todo el País, reservada la adquisición para los órganos de seguridad pública federal e estatal, municipal y por las empresas de seguridad privada regularmente constituidas, en la forma prevista por Ley. Naturalmente no somos ingenuos de ajuiciar que solamente la restricción (prohibición) del uso de armas de fuego, por sí sólo, ecuacionen en definitiva e inmediatamente el problema de la violencia. Sabemos. Es obvio que el arma de fuego puede ser substituida por otras, tal vez no tan “eficientes”. En la ausencia de estructura el aparato represivo y preventiva del Estado, las armas de fuego continuarán llegando a las manos de los marginales y haciéndolas sus víctimas. Por eso, urge meditar que debemos aprender a defendernos, desarmando, antes de todo, nuestros espíritus y esto solo se consigue por la práctica del amor es da fraternidad.

Es cierto que la sociedad de hoy no está reducida a ruinas irrecuperables.”El espirita esta llamada la función de viga robusta, susceptible demostrar que no todo se perdió. Hay quien dice que la Humanidad yace en proceso de desagregación. El Espirita es invitado a guardarse por célula sana, capaz de abrir camino para la recuperación del organismo social. El Espirita, donde surja la destrucción, se convierte en apelo para el rehacimiento, donde explote la indisciplina, se hace pilar del orden y, donde labre el pesimismo, se yergue, de inmediato, por el mensaje de la esperanza-.(4)

Por eso, la solución que la Doctrina Espírita presenta para la violencia es la educación en su amplio aspecto. El Espiritismo, esencialmente educativo, nos conclama al amor y a la instrucción que podrán formar una nova mentalidad entre los hombres. Hasta porque la violencia es el fruto espurio de la ignorancia humana. Renaciendo de la agresividad animal explota en la naturaleza gracias a las bases del egoísmo, el cáncer moral que carcome el organismo social. El antídoto al egoísmo es el altruismo (amor al prójimo, abnegación). Por consecuencia, la mejor manera de tornar una sociedad justa y altruista es la educación de las generaciones nuevas. Sabiendo que, a través de la educación, formaremos caracteres saludables, deberemos investir todo en esta obra libertadora, que es una de las más elevadas expresiones de la caridad.

Notas e referências bibliográficas: 

(1) Hoje, no Brasil, existem três empresas fabricantes de armas de fogo de onde grande parte de sua produção é destinada à exportação.
(2) Disponível em http://www.msn.com/pt-br/noticias/brasil/as-50-cidades-mais-violentas-do-mundo-brasil-tem-16-na-lista/ar-BBdyjVo?ocid=mailsignout, acessado em 01/02/201
(3) Xavier, Francisco Cândido. O Consolador, Ditada pelo Espírito Emmanuel, RJ: Ed FEB, 2001, perg 199.
(4) Xavier. Francisco Cândido. Livro da esperança, ditado pelo Espírito Emmanuel, Uberaba/MG: Ed CEC, 1964

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