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quinta-feira, 1 de outubro de 2009

CÉLULAS TRONCO Y FLUIDO VITAL (15.03.08)


Traducido por: Merchita

Algunos estudiosos hacen alusión a la intensidad del principio vital, en las células embrionarias, está más presente que en los congéneres adultos encontrados en la medula ósea, en la placenta y en el cordón umbilical; en la capacidad de diferenciarse y constituir diferentes tejidos en los órganos del cuerpo humano; y, en la especialidad de la auto replicación. Sobre el principio Vital Kardec, en "La Génesis", explica) (…) Hay en la materia orgánica un principio especial, inaprensible (grifamos) y que aun no puede ser definido: el principio vital. Activo en el ser viviente ese principio se aya extinguido en el ser muerto; tal principio es un estado especial, una de las modificaciones del fluido cósmico, por la cual este se torna principio de la vida. La vida, por tanto, "como efecto" proveniente de un agente principio vital sobre la materia (fluido cósmico) tiene, por sustentación, la materia y el principio vital en estado de interacción activa, de forma continua. Proveniente de la misma fuente original - pues "reside" en el "fluido magnético animal", que, a su vez, no es otro sino el fluido vital - tiene, con todo, la condición peculiar de vincular el contacto con el principio espiritual". (1) Obviamente, no son la misma cosa el principio espiritual y el principio vital. La materia tiene una vitalidad independiente del Espíritu y el espíritu tiene una vitalidad independiente de la materia. Esa doble vitalidad reposa en dos principios diferentes.

El principio vital es uno solo para todos los seres orgánicos, modificado según las especies. Es el que les da movimiento y actividad y los distingue de la materia inerte, por cuanto el movimiento de la materia no es la vida. Ese movimiento, ella lo recibe, no lada. Por tanto, su intensidad solos e altera en la diferencia de las especies. Ese agente, sin la materia, no es la vida, pues, es precisa la unión de las dos cosas para producir la vida. "El principio vital es la fuerza motriz de los cuerpos orgánicos. Al mismo tiempo en que el agente vital estimula los órganos, la acción de ellos mantiene y desenvuelve la actividad del agente vital, casi del mismo modo como el atrito produce el calor". (2)

En cuanto a la cantidad del fluido vital, no es absoluta ni la misma en todos los seres orgánicos. Varía según las especies y entre los individuos de la misma especie. Algunos hay, que se hallan, por así decir, saturados de ese fluido, mientras otros lo poseen en cantidad apenas suficiente. De hay, el porque, para algunos, la vida es más activa, más tenaz y, en cierto modo, superabundante. La cantidad de fluido vital se agota. Puede tornarse insuficiente para la conservación de la vida, si no fuera renovada por la absorción y asimilación de las substancias que lo contienen. El fluido vital que el Espíritu, en cierto modo, emite, de la vida ficticia y momentánea a los cuerpos inertes; pues es que el periespiritu no es mas de lo que ese fluido vital, se sigue que cuando el espíritu está encarnado, es el mismo quien da vida a su cuerpo, por medio de su periespiritu, conservnandoe unido a es e cuerpo, en cuanto a la organización de este lo permite. Cuando se retira, el cuerpo muere". (3)

Existen algunas instancias para analizar la cuestión: la primera, antecede a la fecundación y el propósito de la existencia de los gametas (óvulos y espermatozóides ) en el cumplimiento de las finalidades de la encarnación y reencarnación del Espíritu; la segunda, los destinos posibles del producto de la fecundación, aquí considerado el embrión en sus primeros catorce días en las clínicas de reproducción; hay, aun, una tercera etapa de esas gametas (óvulos y espermatozóides ), cual sea la de reestructurar y armonizar las condiciones fisicas, emocionales y, quizás, espirituales de los reencarnados.

Sobre el segundo instante, comprendemos que, para los "estoques" de embriones congelados, que fatalmente serán destinados al descarte, que sirvan, entonces, a los propósitos constructivos al servicio de la vida, en las pesquisas médicas improvisadas con la ética. Evidentemente, que, también, podemos especular la formación de esos "estoques". ¿Como fueron constituidos? ¿Cuál es la razón de las sobras existentes? ¿Por qué pesquisamos, normalmente son producidos 8 o 9 embriones por pareja, para la reproducción, que , a rigor, se aprovechan 2 o tres al máximo. El resto queda aguardando otras tentativas, lo que casi nunca acontece, pues, las parejas los descartan.

Los mentores espirituales son inteligentes lo suficiente para saber que tal o cual ovulo será o no destinado a la producción de células tronco para fines terapéuticos y, por tanto, que ningún espíritu deberá estar ligado a el. Acreditamos, en eso, o, entonces, estaremos entronizando la fuerza vigorosa del "acaso". Creemos que los laboratorios de reproducción humana, aun con sus evidentes limitaciones, serán, en el futuro, instituciones de extrema importancia, inclusive cuando el hombre pudiera generar u n ser humano distante del vientre de la mujer, lo que posibilitará un fenómeno menos doloroso para las mujeres evidentemente.

La literatura complementaria a la Doctrina revela que el fenómeno de la encarnación del Espíritu es por demás complejo, siendo confiado, normalmente, a los Espíritus elevados. André Luiz nos explica que Las Leyes Divinas son Universales. Como tal, es natural que la reencarnación obedezca también a principios automáticos, teniendo en vista, sobretodo, que ese proceso se repite hace billones de años. En el libro "En las Fronteras de la Locura" Manuel Filomeno de Miranda, a través de Divaldo, afirma que lideres de las sombras (especialistas del magnetismo) conocen las técnicas reencarnatorias y hasta las ejecutan en la Tierra.(4)

¿Tenemos mucho que aprender! La realidad es que no sabemos casi nada del proceso reencarnatorio, nos prendemos, aun hoy, a las descripciones hechas por Andre Luiz, más de 50 años a tras. Ninguna pesquisa de mayor relevancia fue elevada a efecto después de Andre Luiz. Pocas veces, hemos solicitado a los Espíritus que describan el proceso, y, muchas veces, hemos asumido como verdades opiniones y descripciones particulares. El asunto, en que pese a nuestro convencimiento, demostrando en el artículo que ya escribimos sobre el mismo tema, es por demasiado complejo y, obvio, no dijimos la palabra final. (5)

La fecundación es un proceso de la creación y esta, necesariamente, se somete al principio de que "nada se crea sin que a la creación presida un designio" (LE -q 336) y, en relación a ese momento, la cuestión 338 de "El Libro de los Espíritu", revela que "el Espíritu es designado antes que sea el instante en que ha de unirse al cuerpo". (6) La fecundación estaría en una de las puntas, como la llave para iniciar el proceso de la ligación célula a célula del periespiritu con el cuerpo en formación, eso es cierto!. Sin embargo, no podemos perder de vista que muchas madres pueden generar hijos solo por el intenso deseo de tenerlos, sin que haya espíritu destinado al cuerpo que se formará, y, claro, al nacer, no tendrá vida. Recordando el texto que publicamos, no vemos sentido en si (colar" un espíritu a un embrión que jamás se desenvolverá, a no ser si fuera por ajuste karmico, como sucede hoy con el aborto no provocado.(7)

Enfatizamos la interpretación de tales conceptos en el Espiritismo, de que los embriones desenvueltos para la pesquisa o aquellos no utilizados por la pareja en proceso de fertilización asistida, no poseen alma, siendo posible su destrucción en Pról. de la vida de otros. O sea, en el ámbito de la doctrina Espirita, no vemos ninguna consecuencia mayor en el acto de que varios embriones no lleguen a buen termino. No estaríamos "matando" un ser, ni traumatizando a un Espíritu.

Como bien señalamos en el articulo publicado (8), Joanna de Angelis explicó que nuestros embriones, puede haber Espíritus ligados o no, también, percibido en la cuestión 356, de "El Libro de los Espíritu". El cuentista no estaría modificando el destino del embrión. Ajeno al propósito de abrigar un espíritu en la reencarnación, aun estaría fuera de las observaciones humanas, en fase de la insuficiencia de conocimientos, reconocer si en el existe o no Espíritu ligado. Es bien verdad que no poseemos instrumentos seguros para saber si hay o no DESENCARNADOS destinados a tal o cual embrión, más, también estamos convencidos de que, entre intentar hacer algo en nombre de la ciencia visando la salud de los ENCARNADOS, o dejar de hacerlo, por recelos o fobias de los impactos de conciencia que rigen en los imaginaciones de algunos, por cristalizado atavismo religioso, es imponderable y extemporáneo obstruyendo a la evolución científica. No nos olvidemos de que el hombre de ciencia esta en la Tierra como colaborador de Dios, para ayudarLo a mejorar la naturaleza.

Exceptuándose los embriones que, efectivamente, no serán aprovechados para la gestación y que se perderán después de tres años de congelación, hay también otras alternativas, en la búsquela de terapias de las dolencias degenerativas, de curso irreversible, como aquellas ya mencionadas en nuestro texto (9), podrán ser buscadas en las pesquisas de las células tronco de la medula, de la placenta y del cordón umbilical y de aquellas recientemente obtenidas de embriones no fecundados por esperma, en que no están presentes los cromosomas masculinos y, por tanto, no resultarían en un proceso de procreación.

La ciencia debe avanzar, hasta porque, de su impulso, también depende el desenvolvimiento de la criatura, más, obviamente, los caminos utilizados no pueden violar lo que, igualmente, ya se constituyó como valores incorruptibles. Por eso, no temamos los avances científicos, hasta porque, el espiritismo está profundamente vinculado a la pesquisa, a la investigación, a la ciencia, a través de su trabajo interminable en el proceso de la evolución. Si el hombre va o no a utilizar el producto de las pesquisas científicas para el bien o para el mal, quedemos tranquilos. Cuando veamos la bomba atómica sobre Hiroshima y Nagasaki, sufrimos el terror de la fusión nuclear. No en tanto, hay están los átomos para la paz.


FONTES:
1- Kardec, Allan. La Gênese, Río de Janeiro: Ed FEB, 2001
2- Ídem
3- Ídem
4- Franco, Divaldo Pereira. En las Fronteras de la Locura, Salvador: ed. Leal, 2000
5- Hessen, Jorge, CIENTÍFICOS ESTARÍAN SUBVERTENDO La ORDEN DIVINA Al MANIPULAR CÉLULAS-TRONCO EMBRIONÁRIAS? - Artículo publicado en 06.04.05, disponible en la web Acceso en 10-03-08
6- Kardec, Allan. El Libro de los Espíritus, Río de Janeiro: Ed FEB, 2001, pergs. 336 y 338
7- CIENTÍFICOS ESTARÍAN SUBVERTENDO La ORDEN DIVINA Al MANIPULAR CÉLULAS-TRONCO EMBRIONÁRIAS? - Artículo publicado en 06.04.05, disponible en la web Acceso en 10-03-08
8- Ídem
9- ídem

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